Un padre y una madrastra de Minnesota han sido acusados de asesinato en relación con la muerte de la hija de ocho años del hombre, después de que supuestamente fue atada dentro de un saco de dormir por orinarse en la cama.
El cuerpo de Autumn Hallow fue encontrado gravemente demacrado después de que la policía de Elk River, Minnesota, respondiera a una llamada sobre una niña que fue encontrada inconsciente en una bañera, dijo la policía según reporta el Daily Mail.
Según la Oficina del Sheriff del condado de Sherburne, al llegar a un complejo en el lado sur del río Elk, los oficiales encontraron a la madrastra de Autumn, Sarah Hallow, de 28 años, realizando compresiones en el pecho de la niña, quien según los oficiales parecía “extremadamente frágil y delgada”.
Los intentos de revivir a la niña no tuvieron éxito, y Autumn fue declarada muerta en el lugar. Según los investigadores, probablemente murió tiempo antes de que la policía recibiera la llamada, según la condición de su cuerpo.
La denuncia penal establece que los agentes que respondieron notaron que Autumn se veía “extremadamente frágil y delgada”, y a pesar de que Sarah Hallow supuestamente afirmó que había encontrado a Autumn boca abajo en la bañera ese día, los agentes también dijeron que su piel estaba seca y su cabello ligeramente húmedo cuando la encontraron.
Según la información policial, Sarah Hallow declaró que Autumn dijo que se iba a dar una ducha, pero cuando fue a ver cómo estaba la niña unos 40 minutos después, la encontró boca abajo en el agua.
Brett Hallow, por su parte, les dijo a los oficiales que se despertó con los gritos de Sarah y que encontró con Autumn acostada junto a ella en el piso.
La policía también dijo que encontraron sangre en el baño y marcas de “alfileres” en la frente.
El hijo de seis años de Hallow y la hija de 10 años de Sarah Hallow fueron entrevistados por investigadores y trabajadores de protección infantil, después del arresto de sus padres.
El niño de seis años contó que sus padres habían usado un cinturón marrón para atar a Autumn y meterla en un saco de dormir rojo, que trasladaron a diferentes habitaciones o a la bañera. Dijo que la ataban cada vez que se portara mal o mojaba la cama.
Tanto Brett como Sarah niegan todas las acusaciones de sus hijos. Sarah negó haberle gritado a Autumn, sujetarla o meterla en el saco de dormir. Brett también negó las acusaciones expuestas en la denuncia.
La madre biológica de Autumn, Kelsey Kruse, dijo que la pareja no le había permitido ver a su hija durante varios meses por preocupación por el coronavirus. También dijo que la última vez que la vio estaba bien.